El Ministerio de Agricultura y Ganadería de Ecuador ha emitido una nueva guía técnica que establece el procedimiento para determinar si una semilla o cultivo obtenido a partir de Edición Génica puede ser registrado o comercializado como un organismo
En septiembre del corriente año Ecuador se sumó a los países que poseen un marco regulatorio para cultivos obtenidos por nuevas técnicas de mejoramiento. La misma está en línea con la normativa que posee Argentina y Brasil. Este avance en la edición genética de plantas en Ecuador se basa en un acuerdo ministerial respaldado por el Código Orgánico Ambiental del Ministerio de Ambiente, que reconoce esta tecnología como no transgénica.
El Ministerio de Agricultura y Ganadería de Ecuador ha emitido una nueva guía técnica que establece el procedimiento para determinar si una semilla o cultivo obtenido a partir de técnicas de mejoramiento de precisión puede ser registrado o comercializado como un organismo convencional.
Esta guía técnica se basa en la Ley Orgánica de Agrobiodiversidad, Semillas y Fomento de la Agricultura Sustentable y su Reglamento.
Según el ministerio de Agricultura El Acuerdo Ministerial 063 será aplicable a todas las personas naturales o jurídicas (públicas o privadas) cuya pretensión sea investigar, desarrollar, sembrar o evaluar en el campo, importar, exportar, movilizar, almacenar y comercializar semillas o cultivos que hayan sido obtenidos a partir de técnicas de mejoramiento de precisión, a través del Comité Técnico de Semillas (CTS) Conformado mediante Acuerdo Ministerial 163/2020, el que se constituirá en el ente de consulta y emitirá criterio técnico para determinar si una semilla o cultivo obtenido a partir de técnicas de mejoramiento de precisión, puede registrarse como un organismo convencional en respuesta a una Solicitud de Análisis Preliminar.
El director del INIAP enfatizó que este esfuerzo requiere recursos económicos importantes, equipos especializados y profesionales capacitados, que si bien en su primera etapa no es significativo, posteriormente será fundamental la colaboración con otros socios para compartir los costos. Jaramillo mencionó que se espera obtener un presupuesto de 7 millones de dólares a través del Fondo de Investigación en Agrodiversidad (FIASA) para financiar proyectos relacionados con la edición genética.
Por su parte, José Luis Zambrano, director de investigación del INIAP, resaltó que este avance en la edición genética beneficiará al sector de investigación, la academia y, sobre todo, a los agricultores. Se espera acelerar el proceso de desarrollo de variedades vegetales y, por ende, su comercialización, lo que permitirá a los agricultores acceder más rápidamente a variedades mejoradas. Además, se destacó que la edición genética será una herramienta valiosa en la lucha contra el Fusarium raza 4 en banano y en la reducción del contenido de cadmio en cacao, dos desafíos importantes para la agricultura ecuatoriana.
Este avance en la edición genética de plantas en Ecuador se basa en un acuerdo ministerial respaldado por el Código Orgánico Ambiental del Ministerio de Ambiente, que reconoce esta tecnología como no transgénica. Se anticipa que en un plazo de menos de 7 años se comenzarán a ver resultados concretos de esta iniciativa, lo que podría revolucionar la agricultura sostenible en el país, dijo Zambrano.
Esta nueva guía técnica tiene como objetivo brindar claridad y regulación en el uso de semillas y cultivos obtenidos mediante técnicas de mejoramiento de precisión en Ecuador. Se espera que esta normativa contribuya a la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad y garantice los derechos a la salud humana y al ambiente.