Ha transcurrido casi un año desde el inicio de ejecución del Proyecto FONTAGRO “Control sustentable del vector de HLB en la Agricultura Familiar en Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia”. El equipo de La Estación Experimental Agropecuaria San Pedro, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Argentina, fue el primero en seleccionar de manera participativa el lote demostrador en un establecimiento familiar citrícola.
Silvana Giancola, investigadora del Centro de Investigación en Economía y Prospectiva (CIEP) del INTA, líder del proyecto FONTAGRO, explica que “promovemos la participación activa de los actores territoriales como estrategia para el escalamiento del manejo integrado de plagas (MIP) con foco en el vector del HLB en la citricultura familiar. Así, la elección participativa de los lotes demostradores (LD) en establecimientos familiares, forma parte de esta estrategia en los cuatro países y San Pedro fue el pionero”. En este sentido, aclara que “había fuertes antecedentes de trabajo colectivo y participativo en San Pedro, lo cual explica, en gran parte, el éxito de la adhesión al proyecto”.
Norberto Angel, Jefe de la Agencia de Extensión Rural (AER) INTA San Pedro y referente local del Proyecto FONTAGRO, nos relata en detalle la aplicación del enfoque colectivo, avances y resultados,” la participación en un proyecto que se ocupe del control del vector del HLB, como herramienta de prevención del ingreso de esta temible enfermedad para los cítricos en el NE de la provincia de Buenos Aires, fue considerada de suma importancia por los profesionales que trabajamos en fruticultura en la EEA INTA San Pedro. La participación de productores y entidades vinculadas a la actividad, tal como fue planteada desde el proyecto, es necesaria y al mismo tiempo un desafío para conseguir una adecuada articulación y el aporte complementario de cada una de las partes”.
Dando inicio al FONTAGRO
Para dar a conocer el proyecto y compartir la propuesta se organizó un primer encuentro el 9 de mayo de 2019 en la Agencia de Extensión Rural San Pedro, en la localidad de San Pedro, provincia de Buenos Aires, que contó con la participación de 29 personas. La convocatoria se extendió también al Ministerio de Asuntos Agrarios de la Provincia de Buenos Aires, delegaciones regionales de SENASA e INASE, Subsecretaría de Desarrollo Económico de la Municipalidad de San Pedro, Asociación de Ing. Agr. Costa Norte Bonaerense (ASIACONB), Cámara de Viveristas de San Pedro, Cámara de Productores y empacadores del Noreste de la Provincia de Buenos Aires (CAPROEM), y escuelas agrotécnicas de la zona (Margarita O’ Farrell de Santa Lucía, Escuela Agropecuaria Río Tala, San Pedro y Centro de Formación Rural (CFR) de Baradero).
La jornada se inició con una dinámica, a partir de la cual, se mostraron distintas fotos asociadas a un problema referente al HLB, para conocer la vinculación y experiencia de los presentes con la temática. A continuación, se realizó una presentación del Proyecto detallando sus cuatro componentes. Se remarcó la importancia de seleccionar el lote demostrador de manera participativa. “Se acordó entonces que la participación de CAPROEM en la preselección y presentación fundamentada de él o los candidatos sería fundamental”, expresó Angel. Sobre el final de la reunión se acordaron compromisos, nueva fecha de encuentro y la conformación de un grupo de WhatsApp para compartir novedades, inquietudes y consultas, el cual se mantiene vigente y actualizado, vinculando a los participantes, no sólo en lo referido al proyecto, sino también en información de interés para el sector.
Seleccionando el lote demostrativo
Tal cual estaba previsto, al inicio de la temporada de desarrollo del cultivo, el campo del productor Juan Carlos Capó se convirtió en el escenario para un segundo encuentro. Así fue que el 4 de septiembre se dio a conocer oficialmente el Proyecto y presentación del Lote Demostrativo (LD), ante la presencia de 20 representantes de instituciones y medios de comunicación.
La elección del lote demostrador contó con el apoyo del presidente de CAPROEM, Alejandro Guzzo, expresando la coincidencia con los requisitos exigidos por el proyecto: pequeño productor de la agricultura familiar; interés en implementar nuevas alternativas de manejo con enfoque hacia el Manejo Integrado de Plagas y Enfermedades (MIP); ubicación accesible y adecuada capacidad operativa para cumplir con las actividades; buena disposición para recibir a productores, profesionales y alumnos para realizar reuniones informativas y actividades de capacitación. Además, en el mismo campo hay un lote de la misma variedad y de similares características al LD, que sería utilizado como lote testigo.
Tras las palabras de Guzzo, todos los asistentes manifestaron su conformidad, y luego de realizar una recorrida por el lugar, se generó un espacio para compartir inquietudes. Se planificó una nueva reunión para presentar avances y ampliar la invitación a más productores y profesionales. Además, ante el interés por planificar un viaje con productores y profesionales a una zona con presencia de HLB y su vector; representantes de SENASA y la Subsecretaría de Desarrollo Económico, se comprometieron en organizar esa actividad y compartir una propuesta concreta.
Con la sociedad
“Proteger nuestros cítricos”, tal la frase que invitaba a las primeras reuniones se convirtió en el slogan local del proyecto. El objetivo fue fortalecer el nivel de prevención, participando en dos eventos comunitarios: la “Fiesta de la Naranja de Ombligo” en julio; y en la “Vidriera Tecnológica para escuelas”, que se organiza anualmente en octubre.
La decisión de participar con un stand interinstitucional en la anteriormente mencionada fiesta de la naranja, no solo pretendía socializar la problemática, sino consolidar el equipo interviniente del proyecto. Así fue que el FONTAGRO estuvo presente con su aporte sobre el HLB junto a CAPROEM, SENASA, INASE, la Sociedad Rural y la Cámara de Viveristas. El espacio fue una oportunidad para compartir videos sobre la enfermedad, y realizar encuestas al consumidor, con el objetivo de alcanzar una aproximación sobre los conocimientos que tiene “la sociedad” respecto al HLB; y responder consultas e inquietudes generales. La idea fue operar algunas dimensiones del problema, que van más allá de la enfermedad (hasta la fecha San Pedro se encuentra libre del vector y de la enfermedad), poniendo énfasis en la prevención.
Por otro lado, y con el lema “Frutas sanas”, el sector educativo fue destinatario en la Vidriera Tecnológica con una propuesta que combinó dos ejes: la prevención del HLB (en su mirada compleja de la calidad de plantas, el MIP, y la importancia de la citricultura como fuente de desarrollo económico) y la alimentación saludable.
El productor
Juan Carlos es un pequeño citricultor vinculado a la fruticultura local desde hace más de 30 años, y muchos más a la actividad agropecuaria. Inicialmente su principal actividad fue brindar diferentes servicios a productores locales, actividad que siguió manteniendo cuando en 1990 decidió plantar las 10 hectáreas de su propiedad con naranja de ombligo, selección Navel Seedling. De muy bajo perfil, idóneo en la actividad y con estrecho vínculo con sus colegas, fue el anfitrión del encuentro.
Comenzando los monitoreos y otras actividades
Los monitoreos fenológicos y de presencia de plagas y enfermedades se iniciaron en octubre de 2019, “esta información, cargada en planillas que se unificaron para todos los lotes incluidos en el proyecto, se utilizó para tomar las decisiones sanitarias, priorizando el manejo del lote demostrativo con enfoque de MIP”, explica Angel.
Además, se planificó el manejo del LD realizándose poda y desbrotado, roturación del suelo en la entrefila con disco y rastra de dientes, control de malezas en la fila de plantación y los tratamientos sanitarios de acuerdo al resultado de los monitoreos, empleando agroquímicos conforme al MIP. La puesta a punto de la pulverizadora se realizó a través de la verificación de su funcionamiento y los ajustes necesarios surgidos tras su revisión, aplicándose un volumen por hectárea de acuerdo al TRV.
Gira frutícola
El Proyecto se integró como una actividad sustantiva junto a otras actividades frutícolas de interés para los productores en la región. Esto permitió la organización de una “Gira Frutícola” a la que se sumaron más de 40 participantes para visitar dos escenarios: el lote demostrativo y la Estación Experimental del INTA. Fue una instancia en la que viveristas, fruticultores y profesionales junto a las instituciones vinculadas al proyecto pudieron informarse, capacitarse y discutir distintas temáticas vinculadas a la actividad.
Durante la visita al LD correspondiente al productor Juan Carlos Capó, se presentó el Proyecto “Control del vector de HLB en la Agricultura Familiar en Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia” sus objetivos, componentes, evaluaciones, metodología de selección del lote demostrativo, y su correspondiente manejo. Se explicaron las labores realizadas de poda, trabajo de suelo y control de malezas en la fila, tratamientos para control de plagas y prevención de enfermedades, método de monitoreo empleado, extracción de muestra de suelo para determinar el estado nutricional del cultivo, método de calibración de la pulverizadora y volumen aplicado por hectárea, características de HLB y sus síntomas, el vector, método de muestreo, y el estatus sanitario en la región. Además, se hizo referencia a la presentación oficial del proyecto en Chajarí, Entre Ríos, Argentina realizada del 22 al 23 de octubre de 2019 y la visita de campo compartida en esa localidad.
Sobre el final de la actividad se compartió el estado actual de las plantaciones y las perspectivas para la cosecha 2020, generando un interesante intercambio que continuó en la Estación Experimental, último escenario de la jornada donde se realizó un intenso recorrido por la colección de frutales de carozo, se compartió el Programa de Mejoramiento del INTA San Pedro, y la vivencia del VII Encuentro Latinoamericano Prunus Sin Fronteras en Uruguay.
Proyecciones y desafíos
“Así llegamos a fin de año con el interés y compromiso de las instituciones por continuar con encuentros periódicos para discutir, acordar actividades e informar los avances, con participación de productores, profesionales, estudiantes y la conveniencia de incluir a la sociedad en eventos y acciones que se programen específicamente para informar adecuadamente sobre la importancia de la enfermedad, los cuidados que se deben tener, así como los objetivos y avances del Proyecto”, detalló Angel.
Para cerrar esta campaña hay que evaluar el rendimiento y la calidad de la fruta obtenida en ambos lotes, actividad que se realizará a través de la implementación del Método de Evaluación Fitosanitaria (MEF) como método de estimación; y luego se compararán los valores obtenidos con los reales. “Aún nos queda concretar un encuentro con productores y profesionales para compartir esta información e iniciar la capacitación de monitoreadores, que están retrasadas por la pandemia. No obstante, utilizaremos la tecnología que nos permita comunicarnos respetando las instrucciones de cuidarnos entre todos los participantes”, destaca Angel.
Luego de un año intenso de trabajo, el equipo que lleva adelante el proyecto considera un balance positivo para la experiencia: … “y mirando hacia un futuro promisorio, dada la interacción, participación y el grado de complementariedad alcanzado entre los participantes, continuaremos con una planificación conjunta en la campaña 2020 – 2021 que se iniciará en la próxima primavera, poniendo el mayor esfuerzo en las empresas familiares, con foco en el trabajo participativo y en el escalamiento de esta propuesta, que consideramos será superadora para todas las empresas de la región”, expresa Angel y reflexiona: “Para quienes trabajamos en Extensión sabemos que los procesos de aprendizaje y adopción requieren tiempo para generar transformaciones permanentes”.
Más info: giancola.silvana@inta.gob.ar ; angel.antonio@inta.gob.ar
Autores: Norberto Angel, Lorena Peña y Silvana Giancola