Emprendimiento, Emponderamiento y Diversificación para la Sostenibilidad Nutricional y Ambiental
Con apoyo privado y público, un grupo de campesinos colombianos liderado por mujeres transforma un escenario de empobrecimiento alimenticio y ambiental en un ejemplo de fortalecimiento nutricional y ecológico.
El contexto de la historia
La Vereda Pantano de Arce (Colombia) se encuentra en un ecosistema alguna vez rico en fuentes de agua y especies, a 3.100 msnm.
No obstante, el monocultivo de papa y la expansión de pastizales fueron degradando dramáticamente la vegetación autóctona. La falta de variedad alimentaria resultante ha causado un déficit nutricional en su gente, cuya dieta se apoya básicamente en la papa y derivados de la leche.
La urgente necesidad de revertir esta situación llevó a los pobladores a buscar una manera de multiplicar las fuentes de nutrientes y a la vez restaurar la riqueza de variedades autóctonas.
¿Cómo enriquecer, a la vez, la comunidad, la alimentación y el medio ambiente?
La iniciativa implementada
Con el apoyo de AGROSAVIA y COLCIENCIAS y el asesoramiento de expertos, un grupo de agricultores locales asociados llevó adelante iniciativas en varios frentes:
• capacitación en agricultura orgánica;
• ensayo y adaptación de nuevas variedades de papas y cultivos ancestrales;
• uso colectivo de tierras gerenciado por una emprendedora de la comunidad;
• establecimiento de una empresa desarrolladora y comercializadora de producción.
A su vez, los agricultores han reforestado, contribuyendo a la revitalización de las cuencas de agua.
Learning to control pests organically and diversify for the revitalization of the ecosystem.
La solución tecnológica
En 2015, luego de un trabajo de concientización sobre la importancia de una nutrición y un ecosistema más variados, los agricultores de Pantano de Arce comenzaron a capacitarse sobre el cultivo de un rango amplio de especies sin usar agroquímicos.
A partir de ensayos, aplicaron un paquete tecnológico que incorpora compost a los suelos y el uso de plantas alelopáticas, identificaron tubérculos y hortalizas resistentes a enfermedads como el tizón tardío y desarrollaron métodos amigables al medio ambiente para el control del gusano blanco (Premnotrypesvorax).
Como estrategia de fortalecimiento comunitario, se creó Páramo Farms, una granja de uso colectivo donde las familias tienen acceso a la tierra para producir diversidad y calidad nutricional.
Dos soluciones para garantizar la sostenibilidad del proyecto han sido la postulación para certificación internacional de producción orgánica y el desarrollo de un negocio de snacks saludables.
“Hoy, mis nietas consumen diferentes verduras y hortalizas todos los días, un lujo que en nuestra infancia no conocimos”.
Países participantes
Resultados
En dos años los campesinos pasaron a producir 23 tipos de hortalizas y granos andinos, entre los que se encuentran ocho variedades de papas nativas con alto contenido de hierro, zinc y antioxidantes; “superalimentos” como el kale y el brócoli; y granos ancestrales considerados esenciales para la seguridad alimentaria por la FAO. Asimismo, reforestaron con unos 22.000 árboles de 12 especias nativas.
Estos cambios impactaron también la economía: parte de lo cosechado se comercializa, directamente o como snacks, extendiendo los beneficios a un mayor número de familias.
Finalmente, la contratación de mujeres de la comunidad como mano de obra ha resultado en empoderamiento como fortalecimiento social.