El objetivo principal de esta iniciativa es fortalecer la economía de unidades de producción agrícola familiar de Bolivia y Colombia productoras de papas nativas y tubérculos andinos, a través del desarrollo participativo de paquetes tecnológicos y encadenamientos productivos que impacten en la conservación, valorización, mejora del rendimiento y sostenibilidad ambiental de los cultivos.

Producción de semilla de papas nativas y tubérculos andinos de buena calidad genética y fitosanitaria, de fácil acceso para los pequeños productores en Bolivia y Colombia, con lo cual se espera mejorar el rendimiento y la calidad de éstos tubérculos.Adopción de estrategias de MIPE en los cultivos de papa y tubérculos andinos, que impactarán positivamente en el ambiente, gracias a la disminución en el uso de productos de síntesis química.Apropiación de los procesos y proyectos por parte de las comunidades, lo cual permitirá que sean los mismos agricultores que los lideren colectivamente y que tengan la capacidad de adaptarse a las condiciones cambiantes del entorno y los mercados.

Dentro de la agricultura familiar de regiones altoandinas, los tubérculos andinos como la papa (Solanum tuberosum), la ruba (Ullucus tuberosus) la ibia (Oxalis tuberosa) y el cubio (Tropaeolum tuberosum) son esenciales para la seguridad alimentaria. El cultivo de papa en asocio con la ruba, la ibia, y el cubio es una tradición que se remonta a épocas prehispánicas, proporcionando nutrientes adicionales a la dieta básica de papa. La papa y los tubérculos andinos son alimentos con altos rendimientos energéticos, lo cual hace que su cultivo sea estratégico en regiones en donde se dispone de escasas alternativas económicas, como es el caso los Andes. Adicionalmente su cultivo no depende directamente de los mercados internacionales, las fluctuaciones en el precio de estos tubérculos dependen generalmente de la oferta y la demanda en mercados locales; por lo tanto, en países de bajos ingresos pueden contribuir a amortiguar los efectos negativos del incremento de los precios en otros alimentos, garantizando el acceso y disponibilidad de alimentos en poblaciones con vulnerabilidad alimentaria y nutricional. La papa, el cubio, la ibia y la ruba son tubérculos esenciales en la alimentación de pobladores andinos, en su mayoría pequeños campesinos con escasos recursos. Un mayor consumo de estos tubérculos no resuelve totalmente los problemas de inseguridad alimentaria y desnutrición que padecen los pobladores de estas regiones; sin embargo, la selección de germoplasma local (variedades nativas) de estas cuatro especies, puede contribuir a la inclusión y mejor aprovechamiento de nutrientes (vitaminas, hierro, zinc, etc.) en la dieta de familias campesinas de los Andes. Así mismo, si se mejora el acceso de los agricultores a mercados con valor agregado, estos tubérculos pueden aumentar los ingresos de los productores. En este sentido es importante que los agricultores tengan acceso a tecnologías de producción, que permitan la innovación en sus procesos y productos y se establezcan vínculos con diferentes actores de las cadenas productivas. Con este proyecto se espera desarrollar sistemas de provisión de semillas de papas nativas y tubérculos andinos, económicos y sostenibles para la agricultura familiar, que permitan mejorar la calidad genética, fisiológica y fitosanitaria de los cultivos; así como mejorar el rendimiento en cuanto a cantidad y calidad e igualmente contribuyan a conservar la gran diversidad de estos recursos genéticos nativos de los Andes, de alto valor cultural y nutricional para muchas comunidades. Para alcanzar este propósito es indispensable que los pequeños productores de Bolivia y Colombia lleven a cabo procesos de fortalecimiento socio-organizacional, que les permita tener acceso a tecnología y nuevos mercados a través de metodologías de innovación rural participativa.

Esta iniciativa se alinea con el Plan de Mediano Plazo de Fontagro en sus líneas estratégicas: Fincas en red, resilientes y sostenibles, incrementando la sostenibilidad de los cultivos de papa y tubérculos andinos a través del uso de semilla de buena calidad, la protección de los cultivos y prácticas amigables con el medio ambiente, buenas prácticas agrícolas y la gestión económico-financiera eficiente de la finca. Así mismo, se alinea con la estrategia: Alimentos, nutrición y salud, contribuyendo a la producción de alimentos inocuos y de calidad y la diversificación de dietas a partir del consumo de papas nativas y tubérculos andinos.

Los beneficiarios directos de esta iniciativa son 250 familias de pequeños productores de papa en Colombia (Boyacá y Cundinamarca) y Bolivia (Sacaba), y beneficiarios indirectos 450 familias de pequeños productores de estos tubérculos, así como 2000 personas entre profesionales, técnicos y estudiantes del sector agropecuario en Colombia y Bolivia.