Es una plataforma de cooperación para mejorar los sistemas de producción ganadera en Latinoamérica y el Caribe mediante la introducción de leguminosas en pasturas. Dicha plataforma recabe gran cantidad de datos relevantes sobre productividad animal, emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y secuestro de carbono en el suelo, entre otros. Como impactos ambientales positivos, se espera favorecer el secuestro de carbono del suelo y reducir el uso de agroquímicos, las emisiones de GEI y los lixiviados nitrogenados. Como impactos sociales, se estima una mayor rentabilidad por disminución de costos en uso de fertilizante y mayores rendimientos, aumento de la ocupación laboral en ámbitos rurales y una mejora en la dieta familiar por mayor consumo de proteína de origen animal.

Se espera que el uso de las distintas especies de leguminosas que existen en los países integrantes del consorcio puedan contribuir para aumentar la productividad animal, hacer más eficiente el uso del nitrógeno a través de la utilización de su potencial de fijar el N atmosférico, reducir las emisiones de gases con efecto invernadero (GEI) y mejorar características edáficas, entre ellas principalmente la capacidad de secuestro de carbono.

El presente proyecto agrupa a ocho países que se caracterizan por poseer una importante actividad ganadera, tanto para producción de carne como de leche. Concentran cerca de 400 millones de cabezas de ganado vacuno, que representan más del 20% de las existencias mundiales. Excepto en algún caso, la ganadería se efectúa bajo pastoreo directo. Esta producción se lleva a cabo en agroecosistemas marcadamente diferentes, con una alta diversidad de recursos forrajeros. Sin embargo, existen claras similitudes en gran parte de estos países: (i) la ganadería se desarrolla en áreas marginales para la agricultura; (ii) se observa baja productividad ganadera, con escaso manejo del pastoreo y cargas animales que usualmente son menores que una vaca por hectárea; (iii) los índices de eficiencia son bajos y; (iv) la ganadería es la principal fuente de emisión de gases de efecto invernadero en los ocho países. Las leguminosas forrajeras pueden cumplir un rol central y estratégico por su aporte de nitrógeno a través de la fijación biológica de nitrógeno atmosférico y por la mejora del valor nutritivo de la dieta de los animales, disminuyendo las emisiones de gases de efecto invernadero. El abordaje de estos desafíos y oportunidades se puede lograr de manera más eficiente a través de un esfuerzo en conjunto. Así, el proyecto busca establecer una plataforma regional de cooperación en el mejoramiento de sistemas ganaderos basado en el uso de leguminosas forrajeras.

Esta iniciativa está alineada al Plan de Mediano Plazo 2015-2020 a partir de las siguientes líneas estratégicas: a) adaptación y mitigación del cambio climático, b) intensificación sostenible de la agricultura y gestión de los recursos naturales y c) cadenas de valor y territorios competitivos en un marco de equidad y sostenibilidad.

Los beneficiarios directos son 2.532 personas, entre productores, técnicos, investigadores y estudiantes de los ocho países participantes (Argentina 361, Brasil 163, Chile 333, Ecuador 336, Nicaragua 120, Paraguay 85, República Dominicana 98, y Uruguay 1036). Respecto del tipo de beneficiarios alcanzado, se involucrarán 37 institutos de investigación con sus respectivas estaciones experimentales, 18 universidades, 247 investigadores, y 2.230 productores.